Que las soluciones modulares se han convertido en una alternativa más limpia, sostenible y flexible que las soluciones de obra tradicional no es ningún secreto, pero quizá sí lo sea que las ventajas que proporciona el uso de módulos prefabricados van más allá de espacios en contextos urbanos.
Y es que la arquitectura modular juega un papel muy importante en el acondicionamiento de espacios habitables en entornos hostiles o alejados de la civilización: terrenos montañosos, espacios ubicados en desnivel, zonas de difícil acceso… Pero, ¿de verdad los módulos prefabricados son una solución apta para este tipo de terrenos? No solo sí lo son, sino que además sus prestaciones no se ven resentidas pese a los cambios del entorno.
El papel de la arquitectura modular más allá de espacios urbanos
Normalmente, el uso de módulos prefabricados se ha asociado a entornos y contextos donde existen zonas acondicionadas y propicias para la edificación de estructuras y la acomodación de zonas habitables: junto a edificios, en sus zonas adyacentes, en polígonos industriales, ámbitos empresariales, estadios de fútbol y otras zonas deportivas…
Pero, ¿qué ocurre con aquellos espacios donde se necesita habilitar una zona edificada desde cero, sin que el entorno cuente con aspectos ni características que propicien la construcción de una estructura habitable?
Es en esos casos cuando las bondades de la arquitectura modular salen a la luz, dándole un nuevo significado al concepto de “flexibilidad” al adaptar no solo la distribución de los espacios y permitiendo realizar modificaciones en la extensión de la estructura modular, sino además adaptándose a las características únicas del terreno.
Hablamos de terrenos impredecibles, con desniveles, escarpados y poco proclives a albergar edificaciones. Es gracias al montaje y adaptabilidad de las construcciones modulares que es posible implementar en el sitio estos recursos constructivos garantizando las mejores condiciones de seguridad y habitabilidad.
El uso de los módulos prefabricados de Algeco en zonas inhóspitas y entornos hostiles permite a muchos grupos de trabajo llevar a cabo sus labores diarias sin mayores problemas: equipos dedicados al mantenimiento de instalaciones energéticas, campamentos de emergencia, crecimiento de estructuras en zonas sin edificar… Gracias a las características de la arquitectura modular, es posible crear entornos seguros en zonas poco propicias para permitir el buen funcionamiento de los asentamientos de la zona.
Siempre cumpliendo con todas las medidas de seguridad
Cuando decimos que estos espacios modulares son 100% habitables, no nos referimos solamente a que cumplen con un carácter funcional, sino también con las medidas de seguridad que la normativa vigente establece para la construcción de estructuras habitables y garantizar su buen funcionamiento a través de la instauración de las correspondientes señalizaciones, amplitud de zonas de paso y recursos para hacer frente a cualquier posible emergencia.
Todo ello, unido a la elevada resistencia de los módulos prefabricados, hacen que estos sean los mejores recursos para crear espacios habitables con aguante, seguros y con todo lo necesario para garantizar su buen funcionamiento durante amplias ventanas de tiempo.
Una opción sostenible que hace más viable su implementación en zonas inhóspitas
Los recursos modulares no serían una opción en caso de que no fuesen una alternativa respetuosa con el medio ambiente.
De hecho, teniendo en cuenta que son la opción más sostenible de todas cuantas se pueden escoger para la creación de espacios habitables, solo la arquitectura modular cumple con los requisitos que se esperan para no crear un impacto negativo en aquellas zonas deshabitadas donde sí estén en funcionamiento espacios modulares adaptados a cada tipo de necesidad.
El empleo de módulos prefabricados se enmarca en un contexto donde cada vez es más necesario contar con soluciones constructivas eficaces, rápidas y seguras, adaptadas a cada proyecto y flexibles para poder realizar modificaciones futuras atendiendo a las circunstancias.