El espacio disponible en las instalaciones escolares es un factor fundamental cuando hablamos de capacidades de las aulas, confección de salas para actividades complementarias y demás. En ocasiones, por una cuestión de diseño o por la realización de obras de ampliación o reparación es posible que algunas estancias queden inaccesibles.
No obstante, la escolarización no puede detenerse, dado que el proceso de aprendizaje está regulado por un calendario que ha de cumplirse. Es aquí donde entran en juego las aulas escolares prefabricadas, una solución perfecta para habilitar el espacio necesario para que la actividad tanto de escolares como de docentes se lleve a cabo de una manera adecuada.
Por qué crear nuevos espacios con estructuras modulares
Una de las principales ventajas de incorporar nuevos espacios en un entorno escolar para la realización de nuevas actividades es que se amplía la oferta de servicios formativos del centro, permitiendo que el alumno disponga de todo lo necesario para su correcto desarrollo.
Eso, que repercute de manera positiva tanto en el alumnado como en el propio centro, se puede conseguir gracias a la instalación de estructuras modulares, que pueden ser instaladas en tiempo récord y se pueden desmontar rápidamente, sin alterar el resto de construcciones.
Además, optar por esta solución permite dejar espacio para los objetos e instrumentos que hagan falta, así como los elementos del mobiliario que sea necesario implementar para garantizar el correcto desarrollo de las clases y actividades.
Y es que la piedra angular de las soluciones modulares, sobre todo al ser aplicadas en un entorno escolar, es garantizar que haya espacio tanto para alumnos y personal docente como para los elementos típicos presentes en las aulas escolares.
Teniendo en cuenta que nuestras aulas prefabricadas pueden ser instaladas en muy pocas semanas y que así se pone fin al problema de la falta de espacio, es una ventaja cuyo efecto positivo sobre el centro se multiplica al poder sacarle mucho partido a su instalación en varios frentes.
Beneficios añadidos de incluir soluciones modulares en entornos escolares
Otro de los puntos fuertes de elegir una solución modular para ampliar las posibilidades de un centro escolar es que se trata de espacios 100% personalizables, con capacidad para adaptarse a todas las necesidades. Incluso son una buena solución cuando se trata de situaciones cambiantes en las que el aforo o las necesidades pueden ir viéndose alteradas con el paso del tiempo.
Además, la personalización de estos espacios no solo puede afectar a la distribución de los espacios, sino a la decoración de su interior, algo especialmente importante cuando hablamos de la adhesión de estos espacios a unos ya preexistentes de obra.
Así, se puede alcanzar una coherencia estética perfecta, recreando los mismos motivos ornamentales de suelos, paredes y techos. De hecho, la variedad de decoraciones para aulas escolares es lo suficientemente variada como para poder combinar a la perfección los elementos decorativos de la parte de obra permanente con los de los espacios modulares, suavizando enormemente la transición.
Por tanto, recurrir a ampliar las instalaciones de un centro escolar es lo mejor que se puede hacer a la hora de querer crear nuevos espacios o llevar a cabo otras actividades al margen del resto de alumnos. Y ahí entra en juego la selección del tipo de clase adecuada, ya que hay varios tipos de aulas escolares en función de cuál vaya a ser su finalidad.
Por ejemplo, una clase destinada a la enseñanza no cuenta con la misma disposición ni mobiliario, puesto que se trata de un aula en la que se van a impartir clases.
Y es que con las aulas escolares prefabricadas se puede dar forma a salas de estudio, bibliotecas, clases de idiomas, aulas de música e incluso a salones de actos, y en función del espacio, las preferencias y el presupuesto se puede optar incluso por una solución de más alta gama, como la línea Progress 2, que lleva el nivel de calidad un paso más allá y que son aptas para dar forma a soluciones a más largo plazo e incluso permanentes.
Otros puntos fuertes de recurrir a las aulas prefabricadas
Además de poder instalarse de manera rápida y poder personalizarse por completo tanto en lo que respecta a estética como a disposición, las aulas prefabricadas son instalaciones modulares móviles, es decir, se trasladan a un punto conceto para ser instaladas in situ.
Eso lo que quiere decir es que se transportan pieza por pieza y se montan en el punto de destino, pudiendo transportarlas a cualquier punto donde el cliente quiera para dar forma a la construcción.
Por otra parte, todos los tipos de aulas escolares que puedas encontrar cuentan con un plus: son construcciones ecofriendly, que se pueden adaptar a cualquier tipo de terreno y cuya instalación no tiene un impacto negativo en el entorno natural.
Y es que los materiales con los que están fabricadas las estructuras modulares no emiten materiales contaminantes, por lo que se pueden montar y desmontar en todo tipo de terrenos y en condiciones variables sin miedo a que su presencia tenga repercusiones negativas.
Además, el equipamiento y las soluciones para el mobiliario que forman parte de nuestra gama de Servicios 360 permite personalizar el interior a placer, incluyendo todo aquello que sea necesario para garantizar el normal funcionamiento del aula.
La más adaptada, personalizable y sostenible solución a la falta de espacio
Si además se incluyesen instrumentos escolares elaborados con materiales respetuosos con el entorno natural se fomentaría la preservación de los entornos naturales y se inculcaría a los alumnos la importancia de poder contar con materiales libres de elementos perjudiciales para la salud del planeta en los instrumentos y objetos de uso cotidiano, mejorando su percepción de la realidad y acercándolos a la adopción de soluciones en su día a día.
Por tanto, el uso de aulas escolares prefabricadas reúne varios puntos fuertes: se trata de soluciones que no requieren de trabajos laboriosos de obra, que se instalan con una gran rapidez, han demostrado ser tremendamente versátiles y capaces de adaptarse a las necesidades de cada proyecto, y que además son capaces de ofrecer el confort que hace falta para todo tipo de interiores.
Todo ello sin olvidar que se siguen los más altos estándares de calidad, manteniendo las medidas de seguridad tanto en su transporte como en su manipulación, y todo ello sin comprometer el principio de sostenibilidad que abrazan este tipo de soluciones.
El cuidado del medioambiente es una prioridad, y por eso apostar por la incorporación de aulas escolares prefabricadas en colegios y centros de formación es una buena manera de comprometerse sin poner en jaque la sostenibilidad del entorno natural.
Por último, no hay que olvidar que las soluciones premium permiten garantizar los máximos niveles de comodidad y confort con un equipamiento de la más alta calidad, ideal para crear espacios modulares de primera línea en el ámbito escolar. Por tanto, lo que se hace es adaptar las necesidades de cada proyecto a una solución modular específica, eligiendo la que mejor case con el tipo de espacio al que se pretende dar forma.